Entramos reticentes a la sala, con escasa información sobre como se había adaptado el libro al cine y como se había tratado la pieza original. Sólo sabíamos que regalaban pañuelos para sonarse los mocos llorando en los Cinesa y que eso, era sintomático y nos causaba bastantes prejuicios: “Drama lacrimógeno fácil a la vista“. Sin embargo, no fue así. La sorpresa fue grata y el conjunto adapta el espíritu … Continúa leyendo “Un monstruo viene a verme”, la película que nos reconcilió con nosotros mismos